martes, 15 de junio de 2010

Sueño 5.


Era todo tan hermoso. Lo más hermoso que jamás me ha sucedido. Porque estábamos tú y yo. Solos. Sé que fue tan solo por unas milésimas de segundo, pero estuvimos allí. Todo el mundo circulaba con normalidad con sus coches, apretando las bocinas para avisar al conductor de delante de que el semáforo ya se había puesto en verde. Una decena de abogados corría rumbo a la boca del metro, pues sabían que si no se daban prisa llegarían tarde. Los dependientes del mercado gritaban sus precios, para tener la mayor cantidad de clientela posible. Los niños corrían jugando con su balón, imitando a los mejores jugadores de futbol. Las niñas jugaban encima de un mantel, con varios juegos de cafés de cerámica que les habían prestado sus madres. Y yo, yo me dirigía hacia una exposición que me habían recomendado mis amigas. La música estaba puesta a todo volumen, para así poder evadirme de la realidad, aunque los nervios de los exámenes me lo impedían. Y de repente, cuando finalmente perdí toda esperanza de que todo el mundo desapareciese, tu figura chocó con la mía, tirando mi MP4 al suelo y todos los papeles que me acompañaban. Me ayudaste a recogerlos, y al ir a levantarnos, nuestras miradas se cruzaron. Entonces todo despareció: los gritos, los pitidos, el golpe del balón al rebotar contra la pared, las tazas al chocar las unas con las otras, el contacto de los tacones con el suelo… Y nos encontramos allí, cogidos de las manos y mirándonos fijamente a los ojos. Yo, perdida en tu mirada, en aquellos ojos azules que me quitaron el aliento desde el primer momento en que los vi. Mis piernas empezaron a temblar cuando tú me sonreíste, con esa sonrisa que solo tú podrías hacer. Me devolviste los papeles y, poco a poco, te fuiste perdiendo entre la multitud que iba apareciendo de nuevo. Y yo, allí me quedé, preocupada por no volver a ver esos ojos hasta la próxima noche, y dolida porque realmente no pudeponer nombre a aquel chico del que me enamoré una vez un sueño.

Claro que nos conocimos: nos conocimos una vez en un sueño..

Pau: la chica de tus sueños.

1 comentario:

Abbie dijo...

Qué bonito este sueño, aunque me da pena que no hubieses sabido nada más de él esa noche, pero seguro que lo vuelves a encontrar :)

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